Pan plano con judías verdes francesas al vinagre balsámico y sésamo
Me gustan mucho los panes planos y me encantan las judías verdes francesas, así que ¿por qué no innovar un poco y hacerlos juntos? ;)
El toque del vinagre balsámico es esencial para apreciar aún más el dulzor de estas judías tan versátiles y su combinación con el pan dorado a la sartén hace que sea un pan muy gustoso para acompañar cualquier comida.
Dificultad: media
Tiempo de preparación: 50 minutos + tiempos de reposo
Raciones: 8 panes
Ingredientes:
Para el pan:
♥ 3 tazas de harina de trigo normal + ½ taza extra para amasar
♥ 1 cucharadita de levadura de panadería seca (3g) o 6g si es fresca
♥ una pizca de azúcar moreno (opcional)
♥ ¼ de cucharadita de sal
♥ 2 cucharadas de aceite de oliva (preferiblemente de sabor intenso, picual por ejemplo)
♥ 1 taza de agua templada (a 38-40ºC está bien)
♥ ½ cucharadita de orégano
♥ ½ cucharadita de albahaca
♥ un poco más de aceite de oliva para dorar los panes (esto es opcional)
Para las judías:
♥ aprox. 220 g de judías verdes francesas (de las largas y redondas)
♥ una pizca de sal
♥ 3 cucharadas de vinagre balsámico de Módena
♥ 2 cucharadas de semillas de sésamo normales o tostadas (preferiblemente tostadas)
Mezcla en un bol grande la harina, levadura, sal y azúcar y añade el aceite de oliva y agua templada. Mézclalo bien y amásalo 10-12 minutos, hasta que la masa quede elástica (más elástica que pegajosa). Si tienes amasadora serán 10 minutos. Puedes añadir un poco más de harina si la masa es demasiado blanda y se rompe, o un poco más de agua si te queda hecha una bola seca.
Haz una bola con la masa en el bol, tápalo con un trapito o con film transparente y déjalo leudar en un lugar cálido hasta que doble su volumen (a 24ºC serán unos 45 minutos, si hace más frío tardará más tiempo).
Mientras leuda el pan prepararemos las judías, y para ello primero las blanquearemos.
Lávalas muy bien y escúrrelas. Pon a hervir abundante agua con una pizca de sal en una cacerola mediana-grande a fuego fuerte. Prepara también un bol grande con agua muy fría.
Cuando el agua entre en ebullición fuerte introduce las judías verdes y sumérgelas bien con una cuchara de palo. Deja que vuelva a hervir el agua y sácalas tras 45-50 segundos con unas pinzas o una espumadera, poniéndolas inmediatamente en el bol con agua fría. Si el agua se templa rápidamente, escúrrelo y añade más agua fría.
Deja las judías en agua fría hasta que se enfríen del todo (tardan muy poquito). Después escúrrelas muy bien.
Una vez blanqueadas quitamos los rabillos (los de la parte superior, donde se une con la planta), cortamos las judías por la mitad a lo largo y después en tres partes a lo ancho para que no sean trozos tan grandes.
Mezcla en un bol o un tupper las judías verdes con una pizca de sal, vinagre balsámico de Módena y las semillas de sésamo y déjalo en un lugar fresco (lo puedes dejar en la nevera). Sólo tienes que moverlo un par de veces mientras hacemos el resto de la receta para evitar que las judías de la parte superior no se empapen bien.
Cuando la masa haya leudado prepara la superficie de trabajo espolvoreando con harina y pasa la masa a la mesa. Amásala un par de minutos y dale forma rectangular (o más o menos), estirándola bien con un rodillo y espolvoreando con más harina si fuese necesario (tampoco te pases de harina, lo justo para que no se pegue).
Procura que el rectángulo de masa no sea demasiado fino, ha de tener el grosor aproximado de las judías cortadas (unos 5-6 mm), así será más difícil que se nos deshaga y se nos salgan las judías.
Ve colocando las judías en paralelo al borde superior e inferior, que es por donde vamos a enrollar la masa. No te dejes los bordes laterales. Si queda vinagre y sésamo en el bol, añádelos también, lo más uniformemente que puedas. Espolvorea con el orégano y la albahaca.
Presiona un poquito las judías con la palma de la mano para adherirlas a la masa (no te pases apretando, sólo un poquito).
Enrolla la masa procurando que quede un poco prieta y pinza con los dedos los bordes para que quede bien cerrada. Pon el lado con el “cierre” sobre la mesa.
Corta el rollo en 8 partes más o menos iguales.
Espolvorea con un poquito más de harina.
Coge cada uno de ellos, sella los cortes y ponlos hacia abajo (un poco de forma de bola, con cuidado de no romperlos).
Estíralos con el rodillo para hacer un pan de más o menos 16 cm de diámetro, con el grosor de las judías verdes. Se pueden hacer un poquito más finos y grandes, sólo ten cuidado de que no se rompan. No recomiendo hacerlos mucho más gruesos porque, además de quedarnos más pequeños, tardarán más en hacerse.
Cuando los tengas todos hechos ponlos, separados, en un lugar cálido para que leuden de nuevo. Puedes ponerlos en bandejas para horno cubiertas con papel para hornear. Tápalo con film transparente para evitar que se sequen y deja que reposen hasta que hayan crecido aprox. 1,5 veces su volumen.
Cuando estén listos prepara una sartén grande antiadherente de fondo grueso, calentándola a fuego medio. Si quieres que se doren un poquito más los panes, pon una cucharadita de aceite de oliva en la sartén y extiéndela por todo el fondo con un trozo de papel de cocina doblado.
Cuando la sartén esté caliente pon un pan y tápalo. Necesitará 2-3 minutos antes de darle la vuelta. No lo aplastes con la espátula. Dale la vuelta, tápalo de nuevo y deja que se haga 1-2 minutos más. Debe quedar tierno, esponjoso y ligeramente dorado, sin partes sin hacer. Si ves que se doran muy rápido y no crecen nada, baja un poco el fuego. Y por el contrario, si quedan muy pálidos, sube un poco el fuego.
Repite el proceso con el resto de panes.
Puedes hacerlos al horno si lo prefieres. Precalienta el horno a 190ºC. Hazlos por tandas, mete los que quepan en una bandeja para horno grande con papel para hornear. Puedes pincelarlos con aceite de oliva si quieres. Deja que se hagan 7-10 minutos, hasta que veas que han crecido y se han dorado un poquito (no dejes que se doren mucho o quedarán secos y crujientes). Sácalos y déjalos en un plato, tapados con un trapito, para que no pierdan humedad ni calor.
Si se os enfrían cuando terminéis se pueden recalentar en la sartén (ponlos todos juntos en una pila y tápalo. Deja que se calienten a fuego medio 1 minuto y dale la vuelta a la pila para calentarlos 1 minuto más).
Sírvelos templados o calientes para acompañar cualquier comida. Quedan muy bien con arroces especiados, currys, guisos, etc.
También puedes acompañarlos de salsas como esta para las bolitas de patata, salsa de yogur con alcaparras y eneldo (página 22 del recetario), raita de ajo y cebollino, etc., o pincelarlas con aceite de oliva o margarina vegetal con ajo y perejil.
La idea para esta receta era hacer algo original con judías verdes francesas. Me gustan mucho a la plancha y las meto en cualquier plato, sean salteados, arroces, guisos o salsas, pero quería hacer algo más con ellas, así que, aunque en un principio iba a hacer tortitas (como las chinas), al final acabé cambiando de idea para hacer unos panes planos muy tiernos y esponjosos, como el pan de naan, pero con las judías verdes y el maravilloso sabor que toman con el vinagre de módena + el toque del sésamo. Y esto es lo que salió :)
Podéis seguir las mismas recomendaciones que para otros panes planos en cuanto a cantidades, tipos de harina o ingredientes extra, así que si tenéis alguna duda podéis echar un vistazo a esas recetas. Para este pan también se puede usar la técnica de pan sin amasado que he aplicado otras veces en recetas como la focaccia con tomates secos.
Aunque no es imprescindible blanquear las judías verdes, sí es muy recomendable. Al hacerlo las enternecemos ligeramente además de darles un color vivo y una textura más agradable. Al hacer los panes estarán más tiernas aún y permitirán que comamos cada pieza que tomemos sin que se quede la judía en el otro trozo de pan o que las notemos excesivamente crujientes. Vamos, que homogeneiza texturas en el pan y la experiencia al comerlo es más agradable. Notaremos las judías tiernas, ligeramente dulzonas, con aroma tostado… nada que ver con la cocción al vapor o hervidas ;)
Si tus judías verdes son un poco grandes o tienen bastante formadas las semillas, blanquéalas entre 1 minuto y medio y 2 minutos, así nos aseguraremos de que nos queden bien. No es necesario quitar hebras porque estas judías no tienen salvo que estén demasiado maduras o pasadas. Este es otro de los atractivos de estas judías, que no tienes que molestarte en prepararlas de ninguna forma especial ;)
Panes planos de judías verdes francesas marinadas con vinagre de módena y sésamo
Ingredientes
Para el pan
- 3 tazas de harina de trigo normal + ½ taza extra para amasar
- 1 cucharadita de levadura de panadería seca 3g o 6g si es fresca
- una pizca de azúcar moreno opcional
- ¼ de cucharadita de sal
- 2 cucharadas de aceite de oliva preferiblemente de sabor intenso, picual por ejemplo
- 1 taza de agua templada a 38-40ºC está bien
- ½ cucharadita de orégano
- ½ cucharadita de albahaca
- un poco más de aceite de oliva para dorar los panes esto es opcional
Para las judías
- aprox. 220 g de judías verdes francesas de las largas y redondas
- una pizca de sal
- 3 cucharadas de vinagre balsámico de Módena
- 2 cucharadas de semillas de sésamo normales o tostadas preferiblemente tostadas
Elaboración paso a paso
- Mezcla en un bol grande la harina, levadura, sal y azúcar y añade el aceite de oliva y agua templada. Mézclalo bien y amásalo 10-12 minutos (en amasadora 10 minutos), hasta que la masa quede más elástica que pegajosa. Puedes añadir un poco más de harina si la masa es demasiado blanda y se rompe, o un poco más de agua si te queda hecha una bola seca.
- Haz una bola con la masa en el bol, tápalo con un trapito o con film transparente y déjalo leudar en un lugar cálido hasta que doble su volumen.
- Blanquea las judías verdes 45-50 segundos y deja que se enfríen en un bol con abundante agua helada. Escúrrelas bien.
- Quita los rabillos de las judías. Córtalas a lo largo y después en 3 partes a lo ancho.
- Mezcla las judías verdes con la sal, vinagre de módena y sésamo y déjalo reposar.
- Espolvorea con harina, saca la masa y dale forma rectangular.
- Coloca por encima las judías verdes en paralelo al borde superior y espolvorea con el orégano y albahaca.
- Enrolla la masa y córtala en 8 partes.
- Toma cada parte, sella los bordes y estírala con el rodillo hasta obtener panes de unos 18 cm de diámetro.
- Deja que leuden en un lugar templado hasta que crezcan 1,5 veces su volumen.
- Calienta una sartén antiadherente de fondo grueso a fuego medio y ve haciendo cada pan 2-3 minutos por cada lado, siempre tapado, hasta que crezca, se dore y quede tierno. Puedes pincelar la sartén con aceite de oliva para permitir un mejor tostado.
- En lugar de a la sartén se pueden hacer al horno a 190ºC de 7 a 10 minutos.
- Sirve los panes calientes o templados.