Tarta Mort Subite de frambuesa

Dificultad: media
Tiempo de preparación: ~2 horas + tiempos de reposo
Raciones: para 16-20 porciones
Ingredientes:

♥ 1 cerveza Mort Subite de frambuesa (250 ml)
♥ 3 tazas de harina de trigo
♥ 1 taza de azúcar
♥ 2 cucharadas de azúcar vainillado
♥ 1/2 taza de maicena
♥ 1 yogur de soja de frambuesa o de frutas del bosque
♥ 100 ml de nata de soja/avena/arroz para cocinar
♥ 1 cucharadita de esencia de vainilla
♥ 1/4 de cucharadita de colorante rojo
♥ 3/4 de taza de aceite de girasol
♥ 16 g de levadura de repostería
♥ Harina y margarina vegetal para cubrir el molde
Para el relleno:
♥ 2 tazas de azúcar glacé
♥ 1 cucharadita de esencia de vainilla
♥ 1 cucharada de margarina vegetal
♥ 2 cucharadas y 1/2 de nata de soja para cocinar
Para la cobertura:
♥ 200 g de chocolate de cobertura sin lácteos (52% de cacao)
♥ 50 ml de leche de soja
♥ 1 cucharada de pasta de avellanas
♥ 2 cucharadas de azúcar glacé

Deja todos los ingredientes excepto la cerveza fuera de la nevera, para que estén a temperatura ambiente, al menos media hora antes de empezar.

Precalienta el horno a 175ºC.
Unta el interior del molde con una fina capa de margarina y después espolvorea con un poco de harina, procurando cubrir bien los bordes. Yo he usado un molde mediano redondo bastante alto.

Mezcla en un bol grande la harina con el azúcar, el azúcar vainillado, la maicena y la levadura.

En otro bol aparte pon el yogur de soja y bátelo bien, agregando poco a poco la nata de soja para cocinar, la esencia de vainilla y por último el colorante.

Agrega poco a poco la mezcla líquida al bol de las harinas, intercalando con el aceite y la cerveza, poniendo un poco de cada cosa y batiendo la masa para que se mezcle bien, hasta acabar con todos los ingredientes. La masa tiene que quedar homogénea, sin grumos.

Vierte la masa en el molde y mételo al horno 55 minutos. Puedes comprobar si está hecha cuando lleve 50 minutos de cocción, pinchándola con un palillo largo hasta el fondo. Si sale manchado de masa, déjalo 5-10 minutos más. Haz la comprobación rápidamente para que no se nos enfríe el horno.

Saca el bizcocho y déjalo enfriar en un lugar fresco al menos media hora. Después lo puedes meter en la nevera y desmoldar.

Para hacer el relleno mezcla el azúcar con la esencia de vainilla, la margarina y la nata de soja, batiéndolo bien, hasta que quede una crema homogénea y sin grumos.

Para la cobertura corta el chocolate en trocitos y ponlo en un cazo pequeño a fuego mínimo con la leche de soja o al baño maría, removiendo hasta que se derrita por completo. Apártalo del fuego y añade la pasta de avellanas y el azúcar glacé. Bátelo con un batidor de varillas (a mano) durante unos minutos, hasta que empiece a espesar y enfriarse.

Corta el bizcocho por la mitad, en paralelo a la mesa, con un cortador de tartas o un cuchillo largo, lo más recto posible. Retira la mitad superior y extiende el relleno con una espátula de repostería, un cuchillo plano o una espátula de silicona, y coloca encima la mitad que hemos retirado. Vierte por encima la cobertura y extiéndela bien por los bordes, asegurándote de que quedan bien cubiertos, y por la parte superior, alisándola todo lo posible. Puedes terminar de decorarla con trocitos o virutas de chocolate.
Déjalo reposar en la nevera como mínimo 1 hora antes de servir.

Para teñir la masa podéis utilizar cualquier colorante vegetal rojo o rosa (si usáis el rosa, poned un poquito más), o bien 40 g de remolacha cocida y batida con la batidora (tendréis que añadir 1/2 cucharada más de harina). También queda muy bien en color rojo oscuro o sin ningún colorante (os quedará más amarillita). En rosa potencia más el aspecto visual, y es genial porque además queda una tarta muy aromática gracias a la cerveza y el yogur. No emborraches el bizcocho con nada, sale bastante húmedo y le quitaría gracia al sabor. Muchas veces me preguntáis con qué se pueden emborrachar los bizcochos. La verdad es que no es una necesidad, ninguna de las recetas de bizcochos que os subo quedan para nada secas, es más una cuestión de gustos. Que los bizcochos no lleven huevo no significa que queden secos, ¡para nada! para eso ajusto las recetas añadiendo todo lo que necesitan para que queden jugosos y húmedos. Sólo tienes que probarlo para darte cuenta ;)

Si queréis podéis probar con otras cervezas: de cereza, de naranja, etc. No queda ningún sabor amargo ni a alcohol (con la cocción se evapora casi todo) y además ayuda a que la masa quede muy esponjosa e hidratada. Pensad por ejemplo en los rebozados hechos con cerveza, lo jugosos y tiernos (y crujientes por fuera!) que son. Para otros colores y sabores podéis usar cervezas más o menos tostadas, o con aromas que os gusten.

El relleno y cobertura lo podéis hacer también con otros ingredientes. Yo no tenía frambuesas, pero mi intención era mezclar el relleno con un coulis de frambuesas (habría estado genial), y poner algunas enteras por encima de la tarta. No hubo suerte en el mercado, estaban caras y con no muy buen aspecto. Si las encontráis buenas y bien de precio, no lo dudéis.

Pues esta es la tarta que hice para mi cumpleaños, que ni lo celebré ni nada, pero bueno, una tarta sí que tenía que caer :P