Rollos de calabacín con champiñones y coles de bruselas

Dificultad: media
Tiempo de preparación: 25 minutos
Raciones: para 2-4 personas
Ingredientes:

♥ 1 calabacín grande (500-600 g, 25-35 cm de longitud) o 2 medianos
♥ 2 champiñones medianos
♥ 3 coles de bruselas
♥ 1 diente de ajo machacado (sin nervio)
♥ 1 cucharada de aceite de oliva
♥ ⅛ de cucharadita de tomillo
♥ ⅛ de cucharadita de sal
Para la bechamel:
♥ 2 cucharadas de aceite de oliva
♥ 3 cucharadas de harina de trigo
♥ ¾ de taza de leche de soja/almendras/arroz/avena a temperatura ambiente
♥ ¼ de cucharadita de nuez moscada
♥ ⅛ de cucharadita de pimienta negra molida
♥ ⅛ de cucharadita de sal

Lava el calabacín y córtalo en tiras no muy gruesas a lo largo (2-3 mm está bien). Puedes hacerlo con una mandolina.

Calienta una sartén antiadherente o grill a fuego medio-alto con ½ cucharada de aceite de oliva, extendiéndolo por todo el fondo con un trocito de papel de cocina. Dora ligeramente las tiras de calabacín (por tandas, las que te quepan) aproximadamente 1 minuto por cada lado, lo justo para que estén tiernas y un poquito doradas. Puedes espolvorear una pizca de sal. Ve sacándolas a un plato grande, dejándolas estiradas.

Lava los champiñones y las coles de bruselas. Pica los champiñones y corta las coles en juliana.
Calienta 1 cucharada y media de aceite en una sartén a fuego medio-alto y saltea los champiñones con el ajo y el tomillo 2 minutos. Después añade las coles de bruselas y la sal y saltéalo 3 minutos más. Sácalo a un bol o plato y resérvalo.

Haz la bechamel calentando el aceite en una sartén mediana o pequeña a fuego medio, añade la harina y baja el fuego, removiendo para mezclarlo. Agrega poco a poco la leche vegetal, sin dejar de remover para que no queden grumos, añade la sal, pimienta y nuez moscada y sigue removiendo hasta que se forme una crema espesa. Apágalo y retíralo del fuego (si te han quedado grumos puedes pasarlo por la batidora).

Extiende una capa fina de bechamel sobre cada tira de calabacín, y sobre ésta el salteado de champiñones y coles de bruselas (con 1 cucharada por tira de calabacín será suficiente). Enrolla las cintas y colócalas en un plato para servir.
Puedes terminar la presentación con una salsa y almendras picadas u otros frutos secos.

Para hacer las cintas de calabacín es preferible utilizar calabacines que sean bien grandes y gordos, y a ser posible rectos, porque eso nos facilitará mucho el trabajo con la mandolina, además de que nos saldrán más tiras. No pasa nada si sólo tienes calabacines medianos, pero tendrás que hacer las tiras un poco más finas y tener cuidado al calentarlas porque pueden quemarse fácilmente, así que déjalas menos tiempo, dales la vuelta enseguida y vigílalo para que no se quemen ni se rompan.
Procura que los calabacines no sean demasiado maduros, pueden romperse por todo el centro, a lo largo, que es por donde empiezan a formarse las semillas y su carne está más blanda.

Este plato es un poco “canelones” pero sin pasta. Sólo necesitamos que el relleno sea un poco denso para evitar que se nos salga al enrollarlo, así que se puede usar el que he hecho yo o se puede hacer cualquier otro a base de paté vegetal, soja texturizada con salsa de tomate, puré de patata, boniato, etc. Si lo queréis frío y mucho más rápido, rellenad las cintas con hummus.

Se puede poner salsa por encima y gratinar, que queda muy bien. En lugar de ponerlos en un plato ve dejándolos en una fuente para horno, prepara una salsa y queso vegano para fundir rallado y gratínalo a fuego fuerte 3-5 minutos (lo justo para que se funda el queso y se tueste un poquito). La salsa que he usado yo se hace en un par de minutos, es tomate triturado y tamizado (5 cucharadas) con sal (una pizca), veganesa (1/2 cucharadita), salsa de soja (1/2 cucharadita) y vinagre de arroz (1/2 cucharadita), reducido 4 minutos a fuego medio-bajo. Esta salsa os viene bien también para gratinar (haced más cantidad).
Aprovechad lo que tengáis por la nevera, las cintas se pueden rellenar con cualquier otra verdura u hortaliza: puerro, cebolleta, chirivía, col china, repollo, setas, hinojo, acelgas, espinacas, etc. Sólo hay que cortarlo en trozos pequeños o en juliana fina y saltearlo el tiempo justo para que esté tierno y ligeramente dorado.

Os he puesto que es para 2-4 personas porque dependiendo del tamaño y grosor de los calabacines os saldrán más o menos tiras (y podéis hacer más si tenéis más calabacines), además de que este plato se puede usar como acompañamiento o como entrante.
Si os sobra lo podéis guardar en la nevera en un recipiente cerrado (2 o 3 días).

También cortando el calabacín en cintas más finas podéis hacer ensaladas y platos de pasta, utilizando el calabacín como si fuesen tallarines, poner las cintas como capas para hacer lasagna, o utilizarlos en lugar de alga nori para hacer sushi de calabacín.
En realidad este plato es bastante fácil, os he puesto dificultad media por aquello de cortar con cuidado los calabacines, pero una vez cogido el truquillo no tiene niguna complicación ;)