Pimientos de Padrón rellenos de setas al vino tinto
Dificultad: media
Tiempo de preparación: 45 minutos
Raciones: para 20 pimientos
Ingredientes:
♥ 20 pimientos de padrón
♥ 200 g de setas
♥ 50 ml de vino tinto
♥ 50 g de queso de soja (vegano) tipo edam para fundir
♥ 2 cucharadas de aceite de oliva virgen
♥ 1/2 cucharadita de molinillo de romero, clavo, tomillo y pimienta negra
♥ 100 g de pan rallado
♥ 2 cucharadas de harina de garbanzos
♥ 1 cucharadita de vinagre de manzana
♥ 1 cucharada de perejil fresco picado
♥ 1 cucharada de chili seco en trocitos, con pepitas
♥ una pizca de sal
Lava las setas, corta y desecha las partes duras y pícalas finas. Saltéalas en una sartén antiadherente, a fuego fuerte, con 2 cucharadas de aceite de oliva, espolvoreando con la mezcla de especias y una pizca de sal. Cuando empiecen a tomar color, en unos 3-4 minutos, vierte el vino tinto y remuévelo muy bien. Tras 5 minutos más estarán doradas, retira la sartén y deja que se enfríe un poco.
Lava los pimientos y córtalos con una puntilla por todo el perímetro cerca del rabillo, para sacar las semilas y desecharlas, dejando cada pimiento vacío y con un pequeño sombrerillo que después colocaremos encima.
Ralla el queso de soja y ponlo en un bol o recipiente para tener a mano.
En un bol pequeño pero hondo, mezcla la harina de garbanzos con el vinagre de manzana, el perejil picado y 1/2 vaso de agua hasta que no queden grumos.
En un plato hondo o fuente pequeña pon el pan rallado, por el que pasaremos los pimientos.
Precalienta el horno a 190ºC.
Rellena los pimientos con las setas picadas y el queso de soja rallado, ayudándote con una cucharilla de postre y presionando para que la mezcla compacte dentro del pimiento. Ponle su sombrerillo y para cerrarlo atraviesa el pimiento con un palillo de madera desde la parte superior (al lado del rabillo) hasta un lateral del pimiento. Pasa el pimiento primero por la mezcla de harina de garbanzo, procurando que se impregne bien pero no gotee, y después por el pan rallado, con cuidado de no arrastrarlo ni apretarlo. Puedes ponerle el pan rallado por encima dejándolo caer de las manos. Ve colocando los pimientos en una fuente grande para horno.
Cuando tengas todos rellenos y colocados en la bandeja, con cuidado de no superponerlos, mételos al horno y deja que se hagan durante 15-18 minutos. El pan empezará a ponerse blanco y crujiente al principio, y hay que sacarlos antes de que se doren.
Sirve los pimientos junto con el chili seco.
Para el rebozado he utilizado harina de garbanzo, pero puedes usar cualquier otra harina que quieras: para rebozados, de repostería, para cocinar sin huevo, etc. En ese caso, omite el vinagre. En lugar de perejil puedes usar cilantro o alguna otra hierba que te guste, aunque variará el sabor, pero seguirá saliendo muy bueno.
Salsas para acompañar: veganesa normal, veganesa con chili, bechamel con tabasco, nata de soja (o de arroz) con nuez moscada, chutney de mango, salsa de tomate especiada, etc. En general cualquier salsa densa quedará bien, con dulce o con picante, y evitará que se nos caiga el rebozado.
Recomiendo para esta receta el queso de soja vegano tipo Edam para fundir porque es el que le da mejor sabor, pero puedes usar cualquier otro. Los que no son para fundir, al estar dentro del pimiento, no se resecarán, así que también puedes usarlos. Para un sabor fuerte, elige un queso azul (de Sheese), y si quieres que el relleno quede más cremoso, puedes usar cualquier variedad de queso vegano para untar de Sheese o Tofutti. Como sustituto puedes usar yogur de soja natural (preferiblemente sin azucarar) o una crema de legumbres y anacardos a tu gusto.
El vino tinto no tiene que ser nada especial, te sirve con un vino de mesa común y corriente. Para un sabor especial elige vinos afrutados, que dejarán un gusto ligeramente más dulzón, muy agradable al combinarlo con el de los pimientos.
Las setas, en este caso, son de las más comunes de los mercados (setas de cardo), ya que no estamos en temporada y otras variedades ahora mismo están bastante caras (eso si las encuentras). Con rovellons quedan excelentes, y con shiitake el sabor es mucho más pronunciado. Prueba con las setas que quieras, adaptando los tiempos de cocción para que queden en su punto.
Se puede variar esta receta de tantas formas como ingredientes se te ocurran. Por ejemplo, utilizando soja texturizada, champiñones, chalotas o puerros en lugar de setas, cambiando el queso vegano como comentaba antes, cambiando el rebozado por maíz u hojaldre, o cambiando el método de cocción: hazlos a la plancha, fritos, al vapor o al microondas. Intégralos en otros platos como guisos y potajes, o acompañamiento de arroces.