Lasaña de garbanzos y verduras
Da igual el tiempo que haga, siempre es buena ocasión para hacer una lasaña, ¿verdad? Como a mí me gustan tanto la lasaña y tanto los garbanzos, tenía que asociarlos de alguna manera. Esta no es la típica lasaña “que sabe a verduras cocidas”, para nada. Dorando los ingredientes al principio y con una salsa ligera de tomates cherry conseguimos un relleno tremendeamente gustoso con el que además sentirnos un@s super pros por haber usado los garbanzos de cualquier otra manera que no sea en potaje o hummus. Ahí os lo dejo:
Dificultad: media
Tiempo de preparación: 40 minutos
Raciones: 6-8
Ingredientes:
♥ 1 paquete de placas para lasaña (las que quieras, sin huevo)
♥ 2-3 cucharadas de aceite de oliva
♥ 400 g de garbanzos cocidos y escurridos
♥ ½ puerro mediano
♥ ½ cebolla morada
♥ ½ calabacín mediano
♥ 12-14 espárragos verdes
♥ aprox. ½ taza de nueces picadas o machacadas (con un mortero)
♥ 20-22 tomatitos cherry maduros
♥ una pizca de sal (al gusto)
♥ queso vegano casero o comprado (opcional)
Especias y hierbas:
♥ 2 dientes de ajo
♥ 2 cucharadas de salsa de soja
♥ 2 cucharadas de humo líquido (opcional pero muy recomendable)
♥ 1 cucharada de vinagre de módena (preferiblemente auténtico, sin azúcar ni caramelo)
♥ 1 cucharadita de tomillo
♥ ¼ de cucharadita de orégano
♥ una pizca de pimienta negra molida
Para la bechamel:
♥ 4 cucharadas de aceite de oliva
♥ 4 cucharadas de harina de trigo integral
♥ 2 tazas de leche de soja sin azucarar y sin sabores (u otra leche vegetal a tu gusto)
♥ una pizca de sal
Mira primero las instrucciones de tu paquete de placas de lasaña para ver el tiempo de cocción que necesitan. Si son precocidas solo hay que dejarlas en remojo un ratito, y si son “tradicionales” habrá que dejarlas más tiempo.
Haremos primero el relleno de la lasaña para evitar que la pasta se nos ablande demasiado.
Lava y pica bien finos el puerro y la cebolla.
Calienta el aceite en una sartén grande antiadherente a fuego medio y pon el puerro y la cebolla.
Corta el calabacín en daditos pequeños y añádelo. Retira y descarta los tallos duros de los espárragos. Pica los espárragos en trocitos (más o menos de medio centímetro) y añádelos también a la sartén. Saltéalo todo junto.
Pela los ajos, quita los nervios y machaca o pica bien finos los ajos.
Agrega los garbanzos junto con las nueces, los ajos, tomillo y orégano y saltéalo todo junto unos minutos. Procura aplastar los garbanzos con una espumadera o con la cuchara de madera cuando remuevas.
Corta los tomatitos cherry en cuartos y añádelos a la sartén. Mézclalo todo muy bien. Espolvorea con sal y pimienta. Añade la salsa de soja, humo líquido y vinagre de módena y saltéalo 3-4 veces. Añade 2 tazas de agua, remuévelo y deja que hierva hasta que no quede apenas líquido y se haga una pasta. Para ello solo tendremos que remover ocasionalmente, aplastando los garbanzos con una espumadera o con la cuchara de madera. No pasa nada si quedan garbanzos enteros, pero procura no hacerlo puré todo.
Mientras se hacen los garbanzos pon a hervir el agua para las placas de lasaña. En mi paquete ponía que necesitan 15 minutos de cocción. Lo que hago es hervir el agua, poner las placas en una fuente grande, con un poquito de aceite de oliva, verter el agua hirviendo encima y esperar a que las placas estén tiernas (no hace falta que estén hechas del todo).
Revisa el relleno de garbanzos y cuando esté cremoso (que no líquido), más bien hecho una pasta casi untable, apaga el fuego.
Precalienta el horno para gratinar a fuego medio-alto (calor solo arriba).
Pon una capa de placas de lasaña en el fondo de una bandeja para horno no demasiado grande (así podrás hacer 2 o 3 pisos). Vierte el relleno de garbanzos sobre las placas y extiéndelo bien. Si vas a hacer varios pisos procura no poner demasiado relleno en cada capa.
Ve alternando con capas de pasta hasta terminar la masa y la pasta (termina preferiblemente con una capa de pasta).
Pon en un cazo el aceite de oliva a fuego medio. Cuando esté caliente añade la harina de trigo integral, poco a poco, removiendo con un batidor de varillas manual, hasta que se mezcle perfectamente. Baja el fuego y añade poco a poco la leche de soja sin dejar de remover y batir, hasta formar una crema suave y sin grumos. Procura que no se caliente demasiado o se hará muy espesa (se arregla añadiendo más leche de soja). Añade sal y mézclalo. Pruébalo, rectifica de sal si fuese necesario y vierte la bechamel sobre la lasaña.
Si tienes queso vegano casero o comprado corta unas lonchitas y ponlas sobre la bechamel. Para un efecto además crujiente, ralla otro trocito de queso vegano y ponlo por encima.
Mete la bandeja al horno y deja que se haga unos 10 minutos, hasta que la parte superior esté doradita y gratinada (vigílalo de vez en cuando).
Sácalo y sírvelo caliente :)
Pintaza total, ¿eh? Básicamente es hacer una lasaña normal y corriente, pero la rellenamos con garbanzos y en lugar de usar salsa de tomate la hacemos con los tomates cherry y resto de ingredientes, cocidos todos juntos, para más sabor. Por encima una bechamel corriente y si queremos, queso vegano. Yo he utilizado el queso vegano en lonchas, 2-3 lonchitas cortadas y otro trozo rallado. Si lo queréis hacer con queso vegano comprado os recomiendo que elijáis alguno tipo edam para fundir.
Solo con la bechamel ya se puede gratinar. Es una salsa con suficiente espesor, proteínas e hidratos como para que acabe dorándose la parte más cercana al gratinador o a la resistencia superior del horno. Para que se dore bien procura que la temperatura sea alta y la bandeja esté más arriba que centrada; si el gratinador no está muy caliente lo que pasará es que después de un rato la superficie de la bechamel estará seca y, si acaso, aparecerán manchas de tostado que cambiarán rápidamente a quemado si no tenemos cuidado. No queremos secar la bechamel, solo dorarla por encima, y para eso necesitamos calor fuerte durante poco tiempo. Según el horno que tengas esto puede variar, así que siempre que gratines algo vigílalo, no sea que se nos queme.
Esto es algo que he explicado también en otras recetas similares. Al aplicar calor la bechamel irá espesando. Si aplicamos calor moderado uniforme y durante tiempo prolongado, las proteínas se irán transformando a un estado sólido, los gránulos de almidón se gelatinizarán y formarán un gel duro, los azúcares se caramelizarán, el agua se evapora y las grasas se derriten. Vamos, ladrillo. Es lo que hacemos cuando queremos deshidratar cosas. Las dejamos sin agua y entre eso y lo que sucede a las proteínas y almidones, se nos queda o crujiente o elástico. Para la bechamel no queremos que espese ni que se seque, solo que se dore por arriba, y para ello necesitamos aplicar mucho calor durante poco tiempo. Cuando piensas que vas a hacer las patatas fritas más rápido por ponerlas a tope en el fuego y resulta que se queman por fuera y por dentro están crudas –> ese efecto es el que necesitamos aquí. Hasta cuando haces algo mal, aprendes ;)
Y claro, para un buen tostado superficial también necesitamos ingredientes que lo favorezcan: proteínas (harina integral, que tiene más que la normal, y leche de soja), almidones y azúcares (de la harina y de la soja). Otras harinas, por ejemplo la de arroz, son más almidón que proteínas, y otras bebidas vegetales, como la de avena, contienen menos proteínas que la leche de soja. Tardan más en dorarse, pueden hacer que la bechamel acabe más espesa o coagulada, y los aromas y sabores que desarrollan no son los mismos. Teniendo proteínas en la ecuación, favorecemos las reacciones de Maillard.
“Pero lo puedo hacer con leche de [avena/almendras/quinoa/arroz/etc]” Sí. Que no te lo prohíbo. Te explico por qué no te va a quedar igual :P
“¿Y lo puedo hacer con harina de [arroz/avena/quinoa/sarraceno/etc]” Que sí. De hecho prueba a hacerlo, no preguntes. Mira lo que sucede, pruébalo, aprende de lo que has hecho ;)
¿Por qué garbanzos?
¿Por qué no? :) Es fácil pensar en hacer lasañas con ingredientes de tamaño pequeño porque estamos acostumbrados a rellenarlas con carne picada, así que lo más sencillo es pensar por ejemplo en soja texturizada fina, que se parece un montón (y de hecho es mi favorito para lasañas y canelones), sustitutos de la carne similares (picadillos de no-pollo y cosas así), lentejas, champiñones o espinacas, la única opción sin carne que parece que se pueda encontrar (pero con queso). Si nos esforzamos un poco mñas podemos pensar en tofu desmenuzado, tempeh rallado, calabacín, setas o incluso berenjenas. Pero podemos ir más allá.
¿Cómo tiene que ser un relleno de lasaña para que nos guste?
- Muy sabroso: si algo nos gusta de las lasañas es que su sabor se sale mucho de la “rutina” de sabores que tomamos a diario. Es “especial”. Por eso para esta receta he dorado al principio el puerro y la cebolla, después el resto de ingredientes, incluyendo los garbanzos, y he añadido humo líquido, sabor característico por ejemplo de las salchichas y el “fakon” (bacon vegetal).
- Sin tropezones gordos: por eso machacamos los garbanzos y las nueces. No queremos ir a morder y encontrarnos un trozaco de alguno de estos ingredientes.
- Gratinado, jugoso: con un relleno que no sea seco y una bechamel ligera logramos ambas cosas.
Así que si me da por hacer una lasaña con garbanzos, ¿qué tendré que hacer? Bueno, lo primero cocerlos. Sirven perfectamente los de bote (por eso he puesto 400g). Después dorarlos, de forma que adquieran una gama más amplia de sabores y aromas, y por último machacarlos para obtener un relleno agradable al masticarlo. Los garbanzos no tienden a deshacerse muy fácilmente (salvo que te pases haciéndolos en la olla a presión), así que el resultado final no será una plasta viscosa si no un apetitoso picadillo de verduras y legumbre. Las lentejas rojas por ejemplo sí es más fácil que se nos deshagan, así que si quieres que quede como “picadillo” más que como crema, utiliza lentejas normales (pardinas, castellanas, beluga… las que quieras). Las alubias para mi gusto no quedan tan bien (blancas, negras, pintas, etc), pero sí las judías mungo y las azuki. Las judías tienden a quedar más cremosas, cosa que está muy bien para patés vegetales, por ejemplo, pero para mi gusto es demasiada cremosidad para esta lasaña (para esta, ojo, que si la haces con alubias y soja texturizada es otra cosa).
Al probar la lasaña no sabe a potaje de garbanzos ni a verduras cocidas… entre otras cosas porque hemos utilizado procesos de cocción diferentes. Hemos tostado y salteado los ingredientes, hemos hecho una salsa y después hemos formado capas con la pasta. “Comer legumbres” no significa comer de potaje todos los días, y si cambias la forma de hacerlas y con qué las haces, desde luego también cambia su sabor.
En lugar de usar una salsa de tomate o tomate frito esta vez he hecho la salsa con el resto de ingredientes, a base de tomates cherry, dejando que se deshagan. Podría haber usado tomates de pera pelados (o tomates pelados de lata) o tomate triturado. Son buenas opciones también. Es solo que quería el sabor de los tomates cherry. Cuando están maduros y bien rojos son muy fragantes y tienen un sabor concentrado que resalta mucho al dorarlos, freírlos o asarlos. Para corregir la acidez he utilizado solo 1 cucharada de vinagre de módena (auténtico y artesanal y todo eso, sin azúcar ni caramelo) porque al calentarse irá formando azúcares que corregirán la acidez de los tomates, que por otra parte tampoco estaban muy fuertes. Otras veces utilizo salsa de soja (la normal y corriente, china, tiene azúcar), o melaza, o azúcar moreno (panela)… depende de lo que quiera conseguir.
En este caso los ingredientes no son muy ácidos ni se repiten mucho (salvo el ajo, pero puedes añadir menos), pero si hubiese puesto más cebolla, más ajo, berenjena y tomates de pera normales, sí que habría añadido una cucharada extra de salsa de soja y una cucharadita de melaza. Cuando salteas tomate y cebolla con melaza en seguida consigues sabores y aromas muy apetitosos. Sólo hay que tener cuidado de que no se queme. Si no tienes vinagre de módena hazlo con melaza o panela, que queda estupendo.
Si lo quieres hacer con salsa de tomate casera, añade solo 1 taza de agua a la sartén. La salsa ya está hecha y solo necesitamos que se mezclen los sabores y que se ablanden un poco más los garbanzos mientras los aplastamos. Es una forma de ahorrar tiempo. Con tomate frito también vale, pero procurando no pasarnos porque lleva bastante aceite y después, en el horno, no queremos que acabe separándose del relleno y notándolo. Lasaña aceitosa… ¡puaj!
En lugar de las verduras que he usado se pueden poner otras (o se pueden añadir más). Por ejemplo pimiento rojo asado, picado fino, que queda estupendo. La berenjena asada o hecha al vapor también sirve. Los ajetes y cebollas de primavera destacan mucho en estos platos. La calabaza asada y cortada en trocitos pequeños le dará un extra de dulzor y cremosidad. Un puñado de pasas también acompaña muy bien (si te gustan). La col china, picada muy fina y añadida al final, queda muy suacevita, igual que la lombarda y el repollo. Puedes poner también coliflor, preferiblemente rallada, añadiéndola al principio, con el puerro y la cebolla. Se dorará y quedará estupenda, como en la boloñesa de coliflor.
Puedes usar también quinoa, avena en copos, mijo, arroz integral… cosas que te hayan sobrado de otras comidas. No tengas miedo a probar, la cocina es como todo, necesitas aprendizaje y práctica ;)
Con las especias digo lo mismo: ponlas a tu gusto. Si te apetece ponerle romero, pónselo. Si te apetece más pimienta, añádela. Si quieres ponerle algún sazonador, hazlo. Prueba y hazlo a tu gusto.
Como la bandeja que he usado era más bien grande y he puesto pocas placas, mi lasaña solo tenía 2 pisos, pero no me importa, me pongo una porción encima de otra y listo :P
Y como ya he terminado de datos el tostón, os cuento cosas más bonitas ;)
¡Nos vemos en la Feria del Libro!
Tanto Lucía como yo estaremos en la Feria del Libro de Madrid firmando libros (no hace falta que lo compres allí, si ya lo tienes tráetelo y te lo firmamos <3).
Estaremos:
Tenéis más info en la web de la Feria del Libro de Madrid, donde hay también buscador de firmas, etc.
Pasaos por allí, que siempre podéis preguntarnos si tenéis alguna duda, conocernos o lo que sea, que nos hace ilusión :)
Estos días también ha salido a la venta el nuevo número de la revista Cuerpo Mente en la que colaboro con un artículo muy completo sobre ensaladas (6 páginas nada menos). Más bien sobre cómo mejorarlas, que ya estamos tod@s hart@s del tomate y la lechuga, verdad? Pues además 8 recetacas exclusivas que os van a gustar un montón porque son de “ensalada en condiciones”. LA ensalada. La envidia de las ensaladas :P Ya está en los kioskos así que yo no me la perdería, la gente que ya lo ha visto le ha encantado (eso me dicen en Instagram <3) y les ha servido de mucho a la hora de planificar comidas :)
También hay en la misma revista un artículo muy interesante sobre pastas sin gluten de Lucía, y un reportaje muy chulo de Paula González sobre santuarios de animales. Es precioso.
También salgo en la revista Sport Life de este mes, en un artículo en el que Paula habla de veganismo y deporte, Lucía nos da 10 pautas para deportistas veganos y yo os dejo un par de recetas llenitas de proteínas y vitaminas y colorines, que también mola :P
Las recetas con el visto bueno de Lucía, que en nutrición es la que manda. Que hay que ser riguros@s siempre :)
Y no sé qué más decir por ahora, entre otras cosas porque estoy terminando este post super tarde, tengo sueño, mañana tengo que seguir haciendo cosas y vale, este no es lugar para mis quejas personales, pero que sepáis que no soy una máquina, soy una personita, y también me canso y todo eso :_)
Espero que probéis a hacer la lasaña porque sé que os va a gustar mucho y que vais a disfrutar haciéndola. Lo de aplastar los garbanzos tiene su punto desestresante ;)
Lasaña de garbanzos y verduras
Ingredientes
- 1 paquete de placas para lasaña las que quieras, sin huevo
- 2-3 cucharadas de aceite de oliva
- 400 g de garbanzos cocidos y escurridos
- ½ puerro mediano
- ½ cebolla morada
- ½ calabacín mediano
- 12-14 espárragos verdes
- aprox. ½ taza de nueces picadas o machacadas con un mortero
- 20-22 to matitos cherry maduros
- una pizca de sal al gusto
- queso vegano casero o comprado opcional
Especias y hierbas
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de humo líquido opcional pero muy recomendable
- 1 cucharada de vinagre de módena preferiblemente auténtico, sin azúcar ni caramelo
- 1 cucharadita de tomillo
- ¼ de cucharadita de orégano
- una pizca de pimienta negra molida
Para la bechamel
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 4 cucharadas de harina de trigo integral
- 2 tazas de leche de soja sin azucarar y sin sabores u otra leche vegetal a tu gusto
- una pizca de sal
Elaboración paso a paso
- Mira primero las instrucciones de tu paquete de placas de lasaña para ver el tiempo de cocción que necesitan. Si son precocidas solo hay que dejarlas en remojo un ratito, y si son "tradicionales" habrá que dejarlas más tiempo.
- Haremos primero el relleno de la lasaña para evitar que la pasta se nos ablande demasiado.
- Lava y pica bien finos el puerro y la cebolla.
- Calienta el aceite en una sartén grande antiadherente a fuego medio y pon el puerro y la cebolla.
- Corta el calabacín en daditos pequeños y añádelo. Retira y descarta los tallos duros de los espárragos. Pica los espárragos en trocitos (más o menos de medio centímetro) y añádelos también a la sartén. Saltéalo todo junto.
- Pela los ajos, quita los nervios y machaca o pica bien finos los ajos.
- Agrega los garbanzos junto con las nueces, los ajos, tomillo y orégano y saltéalo todo junto unos minutos. Procura aplastar los garbanzos con una espumadera o con la cuchara de madera cuando remuevas.
- Corta los tomatitos cherry en cuartos y añádelos a la sartén. Mézclalo todo muy bien. Espolvorea con sal y pimienta. Añade la salsa de soja, humo líquido y vinagre de módena y saltéalo 3-4 veces. Añade 2 tazas de agua, remuévelo y deja que hierva hasta que no quede apenas líquido y se haga una pasta. Para ello solo tendremos que remover ocasionalmente, aplastando los garbanzos con una espumadera o con la cuchara de madera. No pasa nada si quedan garbanzos enteros, pero procura no hacerlo puré todo.
- Mientras se hacen los garbanzos pon a hervir el agua para las placas de lasaña. En mi paquete ponía que necesitan 15 minutos de cocción. Lo que hago es hervir el agua, poner las placas en una fuente grande, con un poquito de aceite de oliva, verter el agua hirviendo encima y esperar a que las placas estén tiernas (no hace falta que estén hechas del todo).
- Revisa el relleno de garbanzos y cuando esté cremoso (que no líquido), más bien hecho una pasta casi untable, apaga el fuego.
- Precalienta el horno para gratinar a fuego medio-alto (calor solo arriba).
- Pon una capa de placas de lasaña en el fondo de una bandeja para horno no demasiado grande (así podrás hacer 2 o 3 pisos). Vierte el relleno de garbanzos sobre las placas y extiéndelo bien. Si vas a hacer varios pisos procura no poner demasiado relleno en cada capa.
- Ve alternando con capas de pasta hasta terminar la masa y la pasta (termina preferiblemente con una capa de pasta).
- Pon en un cazo el aceite de oliva a fuego medio. Cuando esté caliente añade la harina de trigo integral, poco a poco, removiendo con un batidor de varillas manual, hasta que se mezcle perfectamente. Baja el fuego y añade poco a poco la leche de soja sin dejar de remover y batir, hasta formar una crema suave y sin grumos. Procura que no se caliente demasiado o se hará muy espesa (se arregla añadiendo más leche de soja). Añade sal y mézclalo. Pruébalo, rectifica de sal si fuese necesario y vierte la bechamel sobre la lasaña.
- Si tienes queso vegano casero o comprado corta unas lonchitas y ponlas sobre la bechamel. Para un efecto además crujiente, ralla otro trocito de queso vegano y ponlo por encima.
- Mete la bandeja al horno y deja que se haga unos 10 minutos, hasta que la parte superior esté doradita y gratinada (vigílalo de vez en cuando).
- Sácalo y sírvelo caliente :)
Me tienes absolutamente enganchada a tus recetas, ayudándome en el delicioso cambio de mi alimentación y ayudándome a disfrutar de forma increíble. Gracias!!
Esta me la llevo, sin dudarlo, qué pinta más deliciosa!!!
Besos y gracias de nuevo
que buena pinta tiene!! me torturo por las mañanas viendo estas recetas…. con buena gana me comeria un trozo ahora mismo.
Me apunto esta receta para el sabado. Ya te comentare que les ha parecido a mis niños