Borani Banjan (guiso de berenjenas afgano)

Dificultad: fácil
Tiempo de preparación: 30 minutos + tiempos de reposo
Raciones: para 4 personas
Ingredientes:

♥ 3 berenjenas normales (1 y ½ si son muy grandes, o 6 si son berenjenas largas chinas)
♥ 1 cebolla grande (unos 340 g)
♥ 5 tomates medianos (unos 550 g)
♥ 4 dientes de ajo pelados y sin nervio
♥ 1 pimiento verde italiano
♥ 2 cucharadas de concentrado de tomate
♥ 1 taza de agua o caldo de verduras
♥ 1 cucharadita de menta picada (preferiblemente seca, de la que venden en botecitos)
♥ ½ cucharadita de cúrcuma
♥ ½ cucharadita de pimentón dulce o picante (al gusto)
♥ ¼ de cucharadita de pimienta negra molida
♥ ¼ de cucharadita de sal
♥ ½ cucharadita de melaza o azúcar moreno
♥ 4 cucharadas de aceite de oliva (aproximadamente)

Para la salsa de yogur:
♥ 1 yogur de soja sin azucarar (125 g)
♥ 2 cucharadas de nata vegetal para cocinar (de soja, de arroz o de lo que quieras)
♥ una pizca de sal
♥ 1/8 de cucharadita de ajo en polvo (opcional)

Lava muy bien todas las verduras.
Corta las berenjenas en lonchas no demasiado gruesas (de 3 a 5 mm está bien), ponlas en un bol grande, espolvoréalas con sal y llena el bol con agua. Déjalas reposar 30 minutos. Si utilizas berenjenas largas chinas puedes saltarte este paso.

Mientras reposan las berenjenas pela la cebolla y pícala bien fina. Corta los tomates en dados (puedes pelarlos antes sumergiéndolos 1 minuto en agua hirviendo; escúrrelos bien, pásalos por agua fría bajo el grifo y pélalos a mano) y el pimiento en tiras o en trozos medianos. Pica los dientes de ajo bien finos.

Escurre muy bien las berenjenas. Calienta 1 cucharadita de aceite en una sartén grande antiadherente o plancha a fuego medio-alto y ve dorando las rodajas de berenjena por tandas. Extiende bien el aceite por la superficie de la sartén antes de poner la siguiente tanda de rodajas de berenjena (ayúdate con un trozo de papel de cocina doblado). Ve dejando las berenjenas ya doradas en un plato o en un tupper.

Pon en la misma sartén en la que has hecho las berenjenas 2 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-bajo y añade el ajo, la cebolla, menta, cúrcuma, pimentón y pimienta y póchalo todo junto unos 5 minutos, hasta que la cebolla empiece a dorarse. Añade entonces la melaza y el pimiento, mézclalo bien, y agrega el tomate. Sofríelo todo junto un par de minutos y añade las berenjenas doradas, el concentrado de tomate, el agua y la sal. Remuévelo muy bien y sube el fuego. Cuando empiece a hervir ponlo a fuego lento-medio y deja que reduzca el caldo 6-8 minutos, removiendo ocasionalmente.

Mientras se hace el guiso prepara la salsa de yogur.
Mezcla el yogur de soja sin azucarar con la nata de soja (o la que elijas), la sal y el ajo en polvo (es opcional). Bátelo bien con una cucharilla y déjalo a temperatura ambiente hasta el momento de servir.

Cuando veas que queda poco líquido y se ha hecho un guiso cremoso, retíralo del fuego y sírvelo en los platos vertiendo por encima la salsa de yogur. Sírvelo caliente, templado o frío (está muy bueno de las tres formas).

Llevo desde julio más o menos viendo berenjenas muy buenas y a muy buen precio, así que tenía que aprovecharlas, y este plato me llamó la atención por lo simple que es y lo buenísimo que queda. Para hacerlo he estado mirando varias recetas, entre ellas esta de Afghan Cooking, esta otra de Le Plat du Jour, esta de Otago Daily Times (incluye vídeo), y esta del NY Times, mucho más simple y con menos ingredientes. Lo que he hecho ha sido adaptar tanto los ingredientes, para veganizar el plato, como los procesos de cocción para acortar el tiempo y no tener que tirarnos mucho tiempo en la cocina, y para que no quede un plato terriblemente aceitoso (la berenjena es casi todo aire y absorbe el aceite que da gusto), por eso he hecho las berenjenas a la plancha.

Se puede hacer como dicen en algunas de estas recetas, formando capas y metiéndolo al horno, pero yo lo he hecho todo a la sartén porque la cocción es mucho más rápida y para el plato no se necesita gratinar nada, así que más o menos queda parecido. También he ajustado las cantidades de los demás ingredientes para balancear mejor los sabores.
La melaza o el azúcar moreno no aparece en las anteriores recetas pero os recomiendo añadirla para desarrollar más sabores sobre todo de la cebolla y el ajo, y para evitar la acidez de los tomates en caso de que no sean muy muy maduros. Elegid siempre tomates bien maduros y no os darán tanta acidez. Aún así, se puede enmascarar la acidez añadiendo la melaza o azúcar y, en caso de que sean bastante ácidos, 1/8 de cucharadita de bicarbonato (no pongáis más de esta cantidad o cambiará el sabor del plato para mal).

Podéis echar un vistazo a las recetas que os he dicho que he mirado por si queréis cambiar ingredientes o métodos de cocción, pero en general va bien con casi cualquier cosa que tengamos en casa aunque no se ajuste estrictamente a los sabores que ha de tener el plato (por ejemplo curry, cardamomo, cilantro, perejil, zanahoria, chirivía, etc.).

La salsa de yogur es un complemento imprescindible para este plato, la mezcla de sabores y texturas lo hace único, muy agradable, cremoso y aromático. Además está buenísimo tanto caliente como templado o frío, en ese sentido pensad en lo bueno que está frío el pisto, la escalivada o el ratatouille ;) Con la nata vegetal tendréis una salsa de yogur mucho más cremosa, suave y sedosa. Si no tenéis podéis omitirla, aunque os recomiendo que la agreguéis.

Probad a hacerlo, los ingredientes son muy fáciles de encontrar y la receta no tiene complicación, seguro que os gusta bien caliente para este invierno y repetís :)

han probado a hacer esta receta

* Puedes ver aquí la versión que ha hecho Laia ;)
* Aquí puedes ver la versión de Qué bello es cocinar