Batido de chocolate con avellanas
Dificultad: fácil
Tiempo de preparación: 5 minutos
Raciones: para 4 vasos
Ingredientes:
♥ 3 bolas de helado de chocolate sin lácteos
♥ 3 cucharadas de pasta de avellanas
♥ 2 cucharadas de sirope de chocolate sin lácteos
♥ 1/2 litro de leche de soja
♥ 1 cucharadita de vainillina
♥ 1 cucharada de trocitos de chocolate sin lácteos, fideos de chocolate o virutas (opcional)
♥ 1 cucharada de crocanti de avellanas (opcional)
Pon en el vaso de la batidora o en una jarra para batir el helado, la pasta de avellanas y el sirope de chocolate. Bátelo para mezclarlo, añade la vainillina y después la leche de soja poco a poco. Bátelo 2 minutos hasta que quede una mezcla homogénea y sedosa. Sírvelo en vasos espolvoreando chocolate y crocanti de avellanas.
El helado de chocolate: puede ser de cualquier marca que te guste, totalmente vegano (sin lácteos ni grasas animales). Actualmente hay unas cuantas marcas que fabrican helado en tarrinas de 1/2 litro, de 750 ml y de 1 litro. De la que más te guste saca 3 bolas de helado (4 si lo quieres con más sabor) para el batido.
La pasta de avellanas: la que he utilizado es de la marca Almendrina (en su web tenéis más información), es la mejor forma de añadir avellana en preparaciones en las que tiene que ir en forma de pasta, de crema o integrarse con líquidos. No hace grumos y tiene muchísimo sabor. Eso sí, tiene una textura un poco complicada porque es muy pegajosa, en ese sentido es como el tahini.
El sirope: un sirope cualquiera de chocolate sin lácteos, con más o menos azúcar, eso a tu gusto. Si no quieres usar sirope puedes añadir chocolate negro (sin lácteos) fundido.
La leche de soja: siempre recomiendo leches de soja dulces para los batidos, no necesariamente con sabores (a vainilla o a chocolate), pero sí que tengan un gusto dulce en lugar de neutro. Puedes utilizar la bebida vegetal que quieras, sea de soja, de avena, de arroz o de avellanas, que en este caso le dará muy buen sabor. Procura que esté bien fría antes de usarla.
Decoración: trocitos de chocolate sin lácteos, crocanti de avellanas, fideos de chocolate, barquillos, galletas… Añadir una textura crujiente lo hace mucho más interesante, a la vez que decoramos, agregamos sabor y color. En el caso, sobre todo, de los barquillos y galletas, colócalos justo en el momento de servir, ya que con la humedad del batido se pueden ablandar rápidamente.