Flan de cerezas

Dificultad: media
Tiempo de preparación: 30 minutos + tiempos de reposo
Raciones: para 4 flanes medianos (6 pequeños)
Ingredientes:

♥ 150 g de cerezas maduras
♥ 1 cucharada y ½ de azúcar
♥ 1 taza de agua (o ½ taza de agua y ½ taza de leche de arroz o de almendras)
♥ 1 cucharada y ½ de almidón de maíz (maicena) o de tapioca mezcladas con 3 cucharadas de agua, o bien 1 cucharadita de agar-agar en polvo + 1 cucharadita de maicena disuelta en 2 cucharadas de agua
♥ ½ cucharadita de esencia o extracto de vainilla
♥ 4 cucharadas de caramelo líquido (casero o comprado)

Lava muy bien las cerezas, quita los rabillos y el hueso y córtalas en trozos medianos. Ponlas en una cacerola pequeña o en un cazo con el azúcar y ½ taza de agua a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Cuando entre en ebullición baja un poco el fuego y deja que se cueza de 5 a 7 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que haya reducido un poco y tenga color oscuro, textura más parecida a la de un sirope y se haya reblandecido mucho la fruta (muchas se habrán deshecho).
Apártalo del fuego y cuela el líquido a un tupper con un colador fino. Remueve los restos de fruta que queden en el colador para que caiga más pulpa en el recipiente. Déjalo templar un poco.

Pon una cucharada de caramelo líquido en el fondo de cada molde para flan y déjalos en la nevera.

Pon en un cazo mediano el resto del agua (½ taza, o bien ½ taza de leche de arroz o de almendras) junto con el sirope de cerezas que hemos hecho, el agar (si lo usas) y la vainilla. En un vaso o un bol pequeño mezcla el almidón con el agua. Cuando empiece a hervir la mezcla del cazo retírala del fuego (si usas agar deja que hierva 1-2 minutos), añade el almidón bien disuelto y remuévelo todo rápidamente, mejor con un batidor de varillas manual. Vuelve a ponerlo al fuego, al mínimo, y sigue removiendo hasta que la mezcla espese un poco (1-2 minutos). No tiene que espesar tanto como unas natillas, que quede aún un poco líquida.

Saca los moldes de la nevera y llénalos hasta las ¾ partes de su capacidad con el flan de cerezas aún caliente. Pásalos a la nevera para que se enfríen al menos 1 hora antes de servirlos.

Para desmoldarlos dales la vuelta en un plato. Si no sale el flan puedes agitarlo hacia el plato o meter un cuchillo romo por un lado, hasta casi el fondo, para romper el vacío y que salga solo. Si aún así no sale, déjalo media hora más en la nevera.
Sírvelos acompañados de cerezas frescas, nata vegetal montada (de coco por ejemplo) por encima, unos frutos secos… a gusto de cada un@ ;)

Os he puesto algunas alternativas porque estos flanes quedan muy bien de varias maneras.

Con agar os quedarán más elásticos y parecidos a gelatina, y si lo hacéis sólo con almidón quedarán más firmes y cremosos. También para hacerlos más cremosos podéis añadir ½ taza de leche de arroz o de almendras (o leche de soja, lo que tengáis) en lugar de agua. Además de cremosidad aportará un sabor ligero, sobre todo en el caso de la leche de almendras. Podéis probar con otras leches vegetales normales, azucaradas o con sabores, para un resultado diferente.

Se puede aumentar la cantidad de azúcar o cambiarlo por melaza (sólo será necesaria 1 cucharadita), sirope de arce o sirope de agave. Lo importante es que las cerezas estén bien maduras, que tendrán mucho más (y mejor) sabor, se desharán mucho mejor al cocerlas y nos quedará un sirope mucho más oscuro y denso. Puedes dejar la pulpa si quieres, o añadir trocitos de cerezas a la mezcla cuando añadas el almidón.

También os he puesto “dificultad media” porque tanto el sirope como la mezcla del flan hay que hacerlas un poco “a ojo”, controlando la viscosidad que van adquiriendo. Os he puesto unos tiempos aproximados, pero dependerá de muchas cosas, como el cazo que uséis, la temperatura a la que se esté haciendo, la temperatura ambiente, etc. Pero en realidad es una receta fácil, sobre todo si ya habéis hecho cremas, natillas o flanes anteriormente.

Para variar la receta y sacar recetas nuevas se pueden hacer muchas cosas, para empezar cambiar la fruta utilizada. En lugar de cerezas podéis usar frambuesas, moras, fresas, arándanos, melocotón, nectarina, albaricoque, paraguayas, ciruelas… si utilizáis frutas muy ricas en pectina, como la manzana, los arándanos, ciruelas y uvas, tras la cocción se formará un gel que, tras mezclarlo y cocerlo con el resto de ingredientes, nos dará un flan aún más elástico y consistente. Para mejorar el gel puedes añadir piel de limón y/o de naranja.

También podéis utilizar otros sabores añadidos. Yo he puesto vainilla, pero se puede añadir canela, anís, extracto de almendras, etc. Estos sabores también se pueden añadir al caramelo, sobre todo si lo hacéis casero (al final de la cocción añadir unas gotas del extracto o esencia que queráis), o se puede omitir el caramelo y servir tal cual, con algún sirope de frutas, con sirope de arce, etc.

La mezcla se puede poner en poleras y congelar para hacer helado de cereza. En ese caso os recomiendo que uséis mucha más cantidad de cerezas (250 g está bien) y que una vez hecho el sirope (necesitará más minutos de cocción) lo paséis todo junto por la batidora en lugar de colarlo, así tendremos un helado mucho más rico y con más contenido en fruta. También, para evitar que se formen cristales de hielo grandes, podéis añadir ½ manzana a la cocción (por la pectina) y la nata vegetal, incorporándola a la mezcla, en lugar de ponerla por encima. Así haremos los polos mucho más cremosos. Y en lugar de agua, para la segunda parte de la receta, usad una leche vegetal que os guste (de soja, de coco, de almendras, etc.).

Espero que probéis a hacer este flan y que lo variéis de todas las formas que queráis ;)