Crema de naranjas sanguinas con vainilla
Dificultad: fácil
Tiempo de preparación: 10 minutos + tiempos de reposo
Raciones: para 2-4 personas
Ingredientes:
♥ 2 naranjas sanguinas
♥ 1-2 cucharadas de azúcar vainillado
♥ 200 ml de leche de soja/almendras/arroz/avena (cualquier bebida vegetal)
♥ 1 cucharada de almidón de maíz (maicena) o de tapioca
♥ un par de trocitos de chocolate para decorar (opcional)
Exprime las naranjas y prueba un poco del zumo. Si está muy ácido tendrás que añadir a la crema 2 cucharadas de azúcar vainillado. Si no te parece demasiado ácido, con 1 cucharada será suficiente. Cuela el zumo con un colador fino y resérvalo.
Pon a hervir la mitad de la leche de soja con el azúcar en un cazo pequeño a fuego medio.
Mezcla la otra mitad de la leche vegetal con el almidón de maíz o de tapioca y remuévelo bien.
Cuando empiece a hervir la leche de soja con azúcar, retírala del fuego. Remueve la mezcla de leche de soja con almidón y aádela al cazo. Mézclalo muy bien y vuelve a ponerlo al fuego, a fuego lento. Remueve lenta y suavemente mientras se calienta y espesa. Cuando empiece a espesar (con la consistencia de unas natillas) añade las 3/4 partes del zumo de naranja (guarda el resto en la nevera) y sigue removiendo 2 minutos hasta que espese un poco más (las varillas o la cuchara dejan marca al remover).
Retíralo del fuego y viértelo en vasitos de postre. Déjalo en la nevera al menos 20 minutos. Después vierte por encima el resto del zumo que habíamos guardado y sírvelo con un trocito de chocolate.
Es un postre super fácil, tenía la receta guardada desde marzo y no la había subido hasta ahora, así que si no encontráis naranjas sanguinas lo podéis hacer con naranjas de zumo o con limón:
Tenéis la fotoreceta de esta crema de limón aquí.
Aunque la receta es muy fácil, requiere hacer las cosas un poco “a ojo”. El tiempo que tarda la leche (de soja o de lo que queráis) en hervir dependerá del cazo que uséis (tamaño, grosor, material, etc.), no es lo mismo poner a hervir 100 ml de leche de soja en un cazo de 15 cm de diámetro que en uno de 30, a más superficie en contacto con la fuente de calor y más superficie para evaporar agua, antes se cocerá, pero más rápido se secará y quemará, incluso aunque esté a fuego lento. Así que no uséis una cacerola grande, usad un cazo pequeño que tenga una capacidad de 500 ml como mínimo.
Después de que hierva hay que añadir el almidón, que hará que la mezcla espese. Al aplicar calor a la mezcla de almidón éste absorbe el agua y comienza a formar un gel espeso (gelatinización). Para este postre no queremos que gelatinice todo el almidón, sólo parte, así que no lo mantendremos demasiado tiempo al fuego (cuanto más tiempo al fuego más agua absorbe el almidón, más se calienta y más agua de la mezcla se evapora. A menos agua y más gel, más denso y duro se irá poniendo), sólo hasta que veamos que parecen unas natillas espesas. No te preocupes, al enfriarse tendrá más consistencia, aunque no necesitamos demasiada porque no vamos a hacer un flan sino una crema.
Eso sí, a esta crema se le pueden dar más usos, como por ejemplo de relleno de pasteles y bollos. Se puede usar igual que la crema pastelera o la crema inglesa, pero sin necesidad de añadir margarina. Sólo deja que espese un poco más que para hacer crema y deja que se enfríe casi por completo antes de usarla. Mantiene su forma, no se cae ni se derrite.
En determinadas condiciones puede que nuestras cremas, puddings y similares hechos con almidón de maíz o de tapioca (o de patata, o de arroz) no gelatinicen bien y no tomen la viscosidad y firmeza deseada, por la dextrinización, que supone que los almidones se rompen en dextrinas y ya no absorben el agua ni forman cadenas elásticas. Normalmente pasa por acción del calor (mucho calor y poca humedad), pero puede ocurrir por el efecto de ácidos y enzimas. Si añadimos el zumo de naranja, limón u otro ácido al principio del proceso de gelatinización, ocurrirá la dextrinización de los almidones, y esto significa, para nuestra crema, que no va a gelatinizar muy bien, lo hará poco, de forma irregular, o nada. La mezcla tendrá mucha menos viscosidad y no parecerá un gel. El azúcar también retrasa la gelatinización del almidón (y si nos pasamos de azúcar y la mezcla tiene poco almidón, la puede inhibir por completo), así que con un exceso de azúcar también podemos provocar que la crema no espese. Por eso os he puesto que añadáis sólo 1 cucharada de azúcar vainillado (máximo 2) y que agreguéis el zumo casi al final de la cocción. Se puede usar melaza, sirope de agave o sirope de arce en lugar de azúcar y añadir esencia de vainilla.
A esto hay que sumarle que tampoco sabemos la cantidad de ácido que tienen las naranjas que usemos hasta que las probamos, claro, ni la cantidad de zumo que nos va a salir. Por lo general me sale algo más de medio vaso con 2 naranjas sanguinas medianas, lo que es suficiente para darle sabor a la crema y dejar un poco del zumo para poner por encima y que haga de contraste de sabor y textura. Si os sale mucha cantidad (1 vaso o más), no lo pongáis todo, añadid 75-85 ml a la crema y 25-30 en zumo antes de servir.
En el caso de la crema de limón la receta es más escueta y requiere usar el zumo de 1 limón. Por lo general la cantidad de zumo en un limón mediano es bastante pequeña, unos 40 ml, y es suficiente para la crema. Aún así probadlo antes de añadirlo, pues puede que esté muy ácido o muy fuerte de sabor y haya que agregar un poco menos. En caso de que no lo queráis muy fuerte de sabor, podéis usar sólo la ralladura de la piel del limón (aproximadamente 1 cucharada).
Otra cosa que también va a influir en la gelatinización de los almidones para este postre (y con esto ya acabo) es el enfriado. Si lo enfriamos demasiado rápido (metiéndolo en el congelador) sí puede ocurrir que el almidón expulse el agua y se nos quede el postre “con caldo” por encima y con una textura poco homogénea. Lo suyo es dejar que se enfríe a temperatura ambiente y después meterlo en la nevera. Yo he probado a hacerlo de ambas formas con esta misma receta, dejándolo a temperatura ambiente y después a la nevera, o directamente a la nevera. Salvo que tengas la nevera a una temperatura muy baja, no hay problema en meterlo directamente en la nevera.
Y poco más os puedo decir, si tenéis alguna duda siempre podéis poner un comentario o enviarme un mail :)
Echad cuentas de lo que cuesta hacer este postre (~0,65€) y lo fácil que es, y animaros a hacerlo :D