Mousse de zanahoria

Dificultad: fácil
Tiempo de preparación: 40 minutos
Raciones: para 2 personas
Ingredientes:

♥ 5 zanahorias medianas
♥ 1 cucharada de queso crema vegano (he usado Sheese Original)
♥ 1 cucharadita de margarina vegetal
♥ 2 cucharadas de nata de soja para cocinar
♥ 1/2 cucharadita de sal
♥ semillas de amapola (opcional)

Pon a hervir agua en una cacerola mediana (aprox. las 3/4 partes de su capacidad) a fuego fuerte.

Pela y lava las zanahorias, y córtalas en rodajas más bien finas. Cuando empiece a hervir el agua échalas a la cacerola, baja el fuego a medio-bajo, tápalo y déjalo cocer unos 15 minutos, hasta que la zanahoria esté tierna (el tiempo dependerá de lo grandes y gruesos que hayas hecho los trozos).

Cuando veas que las rodajitas de zanahoria están tiernas, escúrrelas y ponlas en un bol con agua helada (sirve agua del grifo y unos hielos). Déjalo reposar hasta que se enfríe (unos 10 minutos).

Escurre muy bien las zanahorias, sécalas un poco con papel de cocina absorbente y ponlas en el vaso de la batidora (o recipiente alto para batidora de brazo) junto con la sal y bátelo bien a velocidad alta, hasta que quede una crema suave y homogénea.
Ahora cambia el accesorio de la batidora por el de varillas (el de montar nata), añade el queso de untar vegano y la margarina, ambos recién sacados de la nevera y bátelo todo a velocidad media 2 minutos y después a velocidad alta otros 2 minutos.

Sirve la mousse de zanahoria en vasos o copas de postre con 1 cucharada de nata de soja para cocinar y las semillas de amapola por encima, frío, como entrante o primer plato.

Aquí el truco es que las zanahorias estén tiernas, que no tengan demasiada agua y “montar” bien la mezcla para que se formen bolitas de aire por dentro y tenga más textura de mousse que de crema de zanahoria. Es importante que no piques o ralles la zanahoria para que se cueza antes, trozos demasiado pequeños absorberán demasiada agua y acabarás con una plasta de zanahoria que será por lo menos 60% agua. Si los trozos, por el contrario, son muy grandes, sólo necesitará más tiempo de cocción (pero también sirve), aunque por fuera se cocerá más que por dentro y es posible que parte superficial de la zanahoria se nos deshaga en el agua de la cocción. Por eso os recomiendo trozos de tamaño medio (podéis aprender más acerca del hervido aquí).

Si no tenéis ningún queso cremoso vegano podéis usar tofu, preferiblemente tofu blando o sedoso (silken tofu), bien frío, bien escurrido (envuélvelo en papel de cocina y presiónalo ligeramente) y el doble de cantidad que de queso vegano.
La nata de soja puede ser de avena/arroz, lo que queráis, si lo importante es que sea nata vegetal para cocinar. Normalmente, si utilizo alguna en concreto, por algún motivo en especial, lo digo. Por ejemplo, cuando para la veganesa recomiendo usar leche de soja es por la lecitina que contiene, que es un buen emulsificante y ayuda a que la mezcla quede ligada y no se corte. En este caso, como en muchos otros, sólo se busca el color, la textura y sabor casi neutro de la nata de cocinar, por lo que nos da igual que sea de soja, de avena de arroz, de trigo o de lo que sea.
La margarina, además de textura, aporta algo de sabor. Si no tienes puedes usar aceite de oliva, pero ten en cuenta que utilizo la margarina porque es sólida a temperatura ambiente y porque puede batirse, espumarse y esponjarse, ayudando a la textura de nuestra mousse.

Podéis probar a hacerla con otras hortalizas que, al ser batidas, tengan una textura parecida a la de la zanahoria. El ejemplo más fácil es la patata cocida. Al batirla queda muy parecida a la zanahoria (también hay que escurrirla y secarla). Otras opciones son el nabo, ñame y boniato. Y que no sean tubérculos, el calabacín y la calabaza dan muy buenos resultados. Si lo quieres hacer con pimientos, mejor asados.